La simple idea tiene algo de fascinante: Y si te dijera que puedes construir tu propia casa de forma rápida, sencilla, económica y bastante más ecológica de lo habitual. Esta claro que tú pondrías el terreno, la mano de obra y unas pocas herramientas. Es más, tendrías que preocuparte de la instalación del sistema eléctrico y fontanería. Pero... ¿no es un precio bajo por olvidarte de una hipoteca a 50 años que te va a perseguir hasta -lo que posiblemente sea- el fin de tus días?
Aquí dejo unos vídeos para que te lo vayas planteando. El procedimiento básico es sencillo: llenar sacos (de propileno) de tierra, colocarlos como ladrillos formando hileras, fijándolos con alambre de púas, prensarlos y nivelar. Y como resultado obtenemos una casa con una resistencia capaz de soportar terremotos.
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